El argentino Maximiliano Caldas, primer extranjero que dirige el seleccionado holandés de hockey sobre césped femenino, afirmó hoy que Las Leonas "es un equipo que derrocha energía, con mucho talento".
Caldas, además, reconoció que durante los "últimos dos años, la Argentina le pasó por arriba" a Holanda.
"Argentina es un equipo que derrocha energía, con mucho talento. Estar acá es un trabajo soñado. Esta es una federación que tiene los recursos para desarrollar los planes de trabajo y para poder trabajar con grupos, que en los últimos dos años fue superada ampliamente por otra federación, que fue Argentina. La pasó por arriba", admitió Caldas en una entrevista con Télam en Amsterdam.
"Contrariamente a lo que la gente piensa, acá en Holanda las jugadoras no son profesinales: estudian, trabajan, reciben una beca. En Argentina se entrenan juntas el triple o el cuádruple que Holanda. Por lo que leo o escucho, las chicas viajan casi todo el año, van a todos lados", expresó.
Y agregó: "Acá los clubes son muy poderosos, por eso no puedo trabajar siempre con las jugadoras, tengo que buscar otras maneras de hacerlo. Para mí, eso no pasó en el pasado y por eso Argentina, con tantas horas de entrenamientos, partidos y tanta disposición al alto rendimiento, hizo que esto pasara".
Caldas, hincha de Boca Juniors, padre de dos hijos holandeses, jugó en el club Ciudad de Buenos Aires hasta 1995 e integró el seleccionado argentino de hockey masculino que disputó los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996 y Sydney 2000.
En 1996, se fue a Australia "a jugar y a correr a una mujer al mismo tiempo", y se quedó allí tres años, primero en Sydney y luego dos más en Perth, hasta el 2000.
"En Australia descubrí la profesión de entrenador. Me di cuenta de que me gustaba mucho, que me salía bien, que me daba mucha energia y que podia aprovechar mi cabeza, mi creatividad, mi pasión", aseveró.
"Después de los Juegos Olímpicos de Sydney 2000 me vine a a Holanda por un año a probar vivir en otro pais. Fui contratado por un club grande de la primera división (Klein Zwitserland), en el que jugué hasta que me retiré en 2005", dijo.
Caldas dirigió después al club Eiaen, de la tercera división: "Lo elegi a propósito, aunque ya tenía ofertas para dirigir equipo de primera, para testear las cosas en las que creía con jugadores que eran estudiantes y ni alta competencia".
Pasó más tarde al club Amsterdam, de la primera división de mujeres durante dos temporadas y posteriormente integró el cuerpo técnico del seleccionado holandès.
Tras los Juegos Olímpicos de Beijing, Caldas fue contratado por el club Bloemendaal, de la primera división holandesa de varones (2008-2009 y 2009-2010), y el 1 de diciembre de 2010 asumió como entrenador del seleccionado femenino.
"Dudé mucho en aceptar, fue un momento de incertidumbre porque en el equipo me podía haber quedado por otros tres años, me ofrecía más seguridad, sentía que tenía mucho espacio más para crecer y, además, me unía una gran union afectiva y emocional con el club", dijo.
"Pero bueno. Fue una posiblidad que me llegó en el momento adecuado. Tengo contraro hasta los Juegos Olímpicos de Londres del año que viene", manifestó Caldas, quien tambien se refirió al Champions Trophy.
"Será un torneo cerrado, en el que cualquiera le puede ganar a cualquiera porque creció mucho el nivel de todos los equipos. El hockey mundial se emparejó para arriba", manifestó.
Por ultimo, Caldas expresó su admiración por Luciana Aymar: "Es la mejor de todas. Físicamente es una jugadora muy dotada, tiene una velocidad extra, que la gente no tiene. Pensás: `La tengo, la tengo`, y se te va. Técnicamente es muy buena. Es un placer verla jugar", finalizó Caldas.
Fuente: Terra
Caldas, además, reconoció que durante los "últimos dos años, la Argentina le pasó por arriba" a Holanda.
"Argentina es un equipo que derrocha energía, con mucho talento. Estar acá es un trabajo soñado. Esta es una federación que tiene los recursos para desarrollar los planes de trabajo y para poder trabajar con grupos, que en los últimos dos años fue superada ampliamente por otra federación, que fue Argentina. La pasó por arriba", admitió Caldas en una entrevista con Télam en Amsterdam.
"Contrariamente a lo que la gente piensa, acá en Holanda las jugadoras no son profesinales: estudian, trabajan, reciben una beca. En Argentina se entrenan juntas el triple o el cuádruple que Holanda. Por lo que leo o escucho, las chicas viajan casi todo el año, van a todos lados", expresó.
Y agregó: "Acá los clubes son muy poderosos, por eso no puedo trabajar siempre con las jugadoras, tengo que buscar otras maneras de hacerlo. Para mí, eso no pasó en el pasado y por eso Argentina, con tantas horas de entrenamientos, partidos y tanta disposición al alto rendimiento, hizo que esto pasara".
Caldas, hincha de Boca Juniors, padre de dos hijos holandeses, jugó en el club Ciudad de Buenos Aires hasta 1995 e integró el seleccionado argentino de hockey masculino que disputó los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996 y Sydney 2000.
En 1996, se fue a Australia "a jugar y a correr a una mujer al mismo tiempo", y se quedó allí tres años, primero en Sydney y luego dos más en Perth, hasta el 2000.
"En Australia descubrí la profesión de entrenador. Me di cuenta de que me gustaba mucho, que me salía bien, que me daba mucha energia y que podia aprovechar mi cabeza, mi creatividad, mi pasión", aseveró.
"Después de los Juegos Olímpicos de Sydney 2000 me vine a a Holanda por un año a probar vivir en otro pais. Fui contratado por un club grande de la primera división (Klein Zwitserland), en el que jugué hasta que me retiré en 2005", dijo.
Caldas dirigió después al club Eiaen, de la tercera división: "Lo elegi a propósito, aunque ya tenía ofertas para dirigir equipo de primera, para testear las cosas en las que creía con jugadores que eran estudiantes y ni alta competencia".
Pasó más tarde al club Amsterdam, de la primera división de mujeres durante dos temporadas y posteriormente integró el cuerpo técnico del seleccionado holandès.
Tras los Juegos Olímpicos de Beijing, Caldas fue contratado por el club Bloemendaal, de la primera división holandesa de varones (2008-2009 y 2009-2010), y el 1 de diciembre de 2010 asumió como entrenador del seleccionado femenino.
"Dudé mucho en aceptar, fue un momento de incertidumbre porque en el equipo me podía haber quedado por otros tres años, me ofrecía más seguridad, sentía que tenía mucho espacio más para crecer y, además, me unía una gran union afectiva y emocional con el club", dijo.
"Pero bueno. Fue una posiblidad que me llegó en el momento adecuado. Tengo contraro hasta los Juegos Olímpicos de Londres del año que viene", manifestó Caldas, quien tambien se refirió al Champions Trophy.
"Será un torneo cerrado, en el que cualquiera le puede ganar a cualquiera porque creció mucho el nivel de todos los equipos. El hockey mundial se emparejó para arriba", manifestó.
Por ultimo, Caldas expresó su admiración por Luciana Aymar: "Es la mejor de todas. Físicamente es una jugadora muy dotada, tiene una velocidad extra, que la gente no tiene. Pensás: `La tengo, la tengo`, y se te va. Técnicamente es muy buena. Es un placer verla jugar", finalizó Caldas.
Fuente: Terra
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