Se conmovió el estadio entero cuando Charito Luchetti le pegó con toda su alma para convertir el tercer gol argentino, aquel que rompería la igualdad y dejaría a las Leonas entre los cuatro mejores y a China fuera de competencia.
Fue un 3-2 lleno de emoción, agonía, garra y la convicción última de que a puro esfuerzo, lograríamos un lugar en la semifinal del sábado.
Esta vez el estadio acompañó. Banderas, bombos, y el himno como nos gusta, coreado por los fans y sentido por las chicas que, formadas en el centro del Estadio Mundialista de Rosario, parecieron respirar las ganas de todos como quien carga combustible.
Viendo jugar a las albicelestes frente a China nos recordó a aquel primer Champions Trophy dirigido por Retegui, con gran despliegue y efectividad pero con dudas en el sistema de juego propio del cambio de técnico. Esta vez la renovación llega para el plantel y el camino también nos enfrentará a algunos obstáculos.
Con China corriendo sin parar e intetando detener a las locales con el rigor propio de quien tiene pocas ideas, las delanteras argentinas encontraron difícil el desborde y la claridad necesaria para poder convertir.
Tres y hasta cuatro rojas tomaron turnos para evitar que Lucha volviera a "humillarlas" como en el glorioso septiembre del 2010. Y sin embargo, fue la "Maga" quien se mostró aquí, allá y en todas partes para marcar el rumbo al equipo.
El mediocampo tuvo hoy a la gran figura del encuentro: la implacable Rosario Luchetti quien no sólo tiene fibra para las fotos sino la sangre del luchador.
Argentina gritó primero. Fue en el minuto 14 que Ashton Lucy, árbitro del partido, pitó penal y Barrionuevo aprovechó para hacer sonar la tabla y poner el 1-0 parcial, resultado que se mantendría hasta la corneta del descanso.
Pero los altibajos de una defensa en construcción, ofrecieron la chance para que Ma Yibo igualara las cosas con un corner corto.
Sin jamás bajar los brazos y con una Macarena Rodriguez solidaria y efectiva en el quite, Las Leonas siguieron buscando el área rival. Una sola chance clara tuvo Merino en el círculo y vaya si la aprovechó. Lo gritó con los brazos de quien nos abraza a todos y el rugido desenfrenado del goleador certero.
Pero aún la mezquindad y rusticidad del juego chino supo encontrar el talón de Aquiles del #2 del mundo. Jugando sin Scarone, afuera con amarilla y tan sólo un minuto después del 2-1, Tang se aprovechó y la incrustó entre el palo y el pie izquierdo de una Succi que nada pudo hacer. 2-2 y a sufrir de vuelta.
Con Lucha indignada por la permisividad de los árbitros, las delanteras arengadas constantemente por el grito del asistente del DT, Santiago Capurro y la valentía de la línea de volantes, las chicas siguieron insistiendo. Una idea fija clavada en la mente: la semifinal con Holanda en casa.
Faltaban 5' para el final y un tiro mordido de corto dió rebote en el pad de Zhang, y Charo, enardecida, adrenalínica, llena de ganas de gritarlo, le pegó con el deseo de quien persigue el sueño y lo logra. Fue 3-2 final, un resultado acorde a la realidad luchada en este encuentro no apto para cardíacos.
Argentina ahora buscará revancha del Champions 2011 anticipadamente. Enfrentará a Holanda el sábado a las 20 hrs, con la expectativa de revivir una final en el mismo espacio que la vió campeonas del mundo.
Nosotras estaremos allí para brindar nuestro apoyo y energía ¿Y vos?
¡Vamos Argentina! ¡Vamos Leonas!
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