Si el nivel de un país en cualquier deporte se mide en función de los resultados de sus selecciones nacionales y de la calidad de su liga, España lleva muchos años demostrando que está entre la élite del Hockey. En la última década, además, sus clubes, e incluso sus selecciones nacionales, han cobrado un nuevo vigor cuya procedencia tiene su origen en el otro lado del Atlántico. El desembarco de jugadores, jugadoras y entrenadores argentinos ha revitalizado la liga.
Para estos emigrantes del Hockey, España es una tierra de oportunidades en las que crecer profesionalmente.
Su elevado número no es producto de la casualidad sino de la necesidad: diez de los veinticuatro entrenadores de División de Honor masculina y femenina son argentinos. La columna vertebral de algunos clubes, femeninos especialmente, es netamente argentina. La carencia de entrenadores profesionales en España y la abundancia de ellos en Argentina motiva el flujo Sur-Norte.
-Sin entrenadores en España-
Carlos Castaño, que llegó en 2003 para entrenar al Atlético de San Sebastián masculino y desde 2005 dirige a la Real Sociedad femenina, subcampeona de la pasada temporada, lo explica así: “Argentina es un país que genera muchos entrenadores porque el Hockey, especialmente desde el boom de Las Leonas (la selección femenina vigente campeona del mundo), es muy popular. En España, en cambio, hay poca gente interesada en ganarse la vida como entrenador”.
La escasez de jugadores y entrenadores se recrudece en ciertas partes de España, por lo que clubes como el Ciudad de las Palmas Gran Canaria 2016, el Ourense Galicia Calidade o el Aceites Sierra Sur Hockey Alcalá, todos femeninos, deben recurrir cada año a jugadoras argentinas para poder completar la plantilla.
“No hay suficientes españolas y de las veinte jugadoras nueve son argentinas. Tres son juveniles procedentes de Benalmádena, la capitana Liliana Cipriani vive en Alcalá la Real desde hace cinco o seis años y las demás son fichajes”, dice el entrenador del Aceites Sierra Sur Hockey Alcalá, el también argentino Sergio Nasso, que lleva tres años en la máxima categoría a pesar de verse obligado a recomponer el equipo cada nueva temporada.
-Un Erasmus de Hockey-
Los jugadores y jugadoras argentinas suelen permanecer un año en España y luego regresan a Argentina, a modo de experiencia personal y profesional en otro país, pero existen excepciones como Carla Rebecchi o Guillermo Schickendantz, ambos del Club de Campo, máximos goleadores de la Liga 2009-10 (Rebecchi), 2008-09 (Schickendantz) y EHL 2008-09 (Schickendantz).
“En 2006 se jugó el Mundial en Madrid y surgió la posibilidad de venir al Club de Campo. Decidí probar un año y al final me encantó y me quedé”, comenta Rebecchi, la única de la Liga española elegida dentro del All Star de 2010.
Schickendantz, por su parte, ha pasado desde el año 2003 por la UD Taburiente (actual Ciudad de las Palmas Gran Canaria 2016), por el Club Egara y desde la pasada campaña milita en el Club de Campo. “Decidí venir a España por el idioma y porque quería crecer como jugador”.
Ambos, al igual que la mayor parte de sus compatriotas, reciben un sueldo de su club a cambio de jugar y entrenar a las escuelas. “En Argentina los jugadores y jugadoras son más amateur que en España; casi nadie cobra”, dice Rebecchi. Schickendantz, en cambio, considera que el auge del Hockey en su país supondrá a corto plazo “una fuente de trabajo muy interesante” y apuesta por retornar a Argentina para ganarse la vida como entrenador una vez que cuelgue el stick.
-Hockey, deporte de masas en Argentina pero España disfruta de una mayor competencia-
Con más de ochenta clubes sólo en Buenos Aires, deporte obligatorio para las niñas desde el colegio y apoyo gubernamental a este deporte, especialmente en categoría femenina, el Hockey argentino vive una época dorada como quedó refrendado en el Mundial de Rosario 2010, en el que las locales consiguieron el título. Sin embargo, a juicio de Alejandro Ayabarrena, el único entrenador argentino que ha ganado la liga y sigue en España (la ganó con su equipo actual, el CD Terrassa femenino en la temporada 2007/08), “España cuenta con la ventaja de una liga muy fuerte, la posibilidad de competir contra ligas como la holandesa, alemana o inglesa y unas buenas selecciones”, lo que supone “que sea atractivo para cualquier entrenador porque se crece continuamente en el aspecto profesional”, dice Ayabarrena, que lleva en España desde 2001 y, como buena parte de sus colegas, el Hockey constituye su principal fuente de ingresos aunque también ejerce de profesor en un colegio.
-Argentinos en la española-
El decano del Hockey argentino en España, el actual entrenador de la RS Tenis masculina Alejandro Siri, llegó al San Vicente en 1991. Después de compaginar las funciones de entrenador-jugador retornó a Argentina en 1997 aunque en 2001 cruzó nuevamente el Atlántico para recalar en el Sardinero. También ha dirigido al Club de Campo, a la RS Tenis y, como prueba de la creciente importancia de los entrenadores argentinos, ha formado parte de las selecciones españolas Sub16 y Sub21 (1992 y 1993 con la Sub16, desde 2004 a 2009 como segundo de la Sub21 y en 2010 como seleccionador Sub21).
Las selecciones españolas no sólo cuentan con entrenadores en sus filas, sino también con jugadores y jugadoras nacionalizados. La delantera del Club de Campo Montse Cruz fue la primera, y tras ella siguieron los hermanos Dabanch, Paula y Gabriel, hijos del que fuera entrenador de la UD Taburiente, Sardinero, RS Tenis y RC Polo Jorge Dabanch, actualmente en el HGC holandés.
“Primero llegó nuestro padre, en el año 2000, y unos meses después nosotros. Cuando tenía 15 años me convocó la Sub16 española y la RFEH aceleró los trámites de la nacionalización. Ahora no se me pasa por la cabeza volver a Argentina sino que quiero hacer mi vida en España”, dice la internacional española Paula Dabanch.
-Hockey globalizado-
Es de suponer que tanta influencia argentina ha debido dejar huella en el Hockey español, pero los entrenadores aluden a aspectos personales más que a otros de cultura nacional hoquística. “La manera de jugar está globalizada y cada entrenador marca su propio estilo”, dice Siri, quien sin embargo considera que en general, el Hockey español “es más ordenado tácticamente que el argentino”.
Castaño también cree que cada entrenador tiene unas preferencias y unas manías que marcan el juego, pero considera común al entrenador argentino “la entrega de sus equipos”. “En Argentina la vida es más complicada, todo cuesta más, y cuesta tanto, que hay que dar el máximo. Los entrenadores argentinos podemos perdonar muchas cosas pero no la falta de entrega”.
De la misma opinión es el entrenador catalán del Club de Campo femenino Arseni Sañé. “Los equipos dirigidos por argentinos suelen ser muy luchadores y agresivos. Nunca bajan los brazos”, dice Sañé, quien considera “positivo para la mezcla de culturas la llegada de entrenadores argentinos” y que, al igual que sus colegas, no cree que exista un modo de jugar argentino u otro español. “A nivel táctico no se pueden inventar muchas cosas y cada entrenador, sea de donde sea, plantea el juego en función de las características de su equipo”.
Uno de los debutantes de esta temporada, el entrenador del RC Jolaseta masculino Pablo Fernández apunta una diferencia importante. “En España todos los partidos se juegan en campo de agua, mientras que en Argentina muchos son de arena, lo que hace que la evolución del hockey sea diferente. Los partidos sobre arena son más lentos y el juego más impreciso. Eso nos aleja del verdadero Hockey. España, además de contar con campos de agua, está cerca de Holanda y se nutre de los conocimientos que vienen de allá. Holanda y Alemania marcan la pauta del Hockey masculino e imponen las modas, y éstas llegan rápido a España. En el femenino, el referente es Argentina”.
Entrenadores argentinos en División de Honor:
Masculino:
RS Tenis: Alejandro Siri
CH Pozuelo: Andrés Mondo
RC Jolaseta: Pablo Fernández
Femenino:
SPV’51: Jorge Lombi
Club Egara: Patricio Keenan
Ciudad de las Palmas Gran Canaria 2016: Marcos Oviedo
Real Sociedad: Carlos Castaño
Aceites Sierra Sur Hockey Alcalá: Sergio Nasso
Ourense Galicia Calidade: Néstor Fabián Mercado
CD Terrassa: Alejandro Ayabarrena
Fuente:Prensa RFEH
Para estos emigrantes del Hockey, España es una tierra de oportunidades en las que crecer profesionalmente.
Su elevado número no es producto de la casualidad sino de la necesidad: diez de los veinticuatro entrenadores de División de Honor masculina y femenina son argentinos. La columna vertebral de algunos clubes, femeninos especialmente, es netamente argentina. La carencia de entrenadores profesionales en España y la abundancia de ellos en Argentina motiva el flujo Sur-Norte.
-Sin entrenadores en España-
Carlos Castaño, que llegó en 2003 para entrenar al Atlético de San Sebastián masculino y desde 2005 dirige a la Real Sociedad femenina, subcampeona de la pasada temporada, lo explica así: “Argentina es un país que genera muchos entrenadores porque el Hockey, especialmente desde el boom de Las Leonas (la selección femenina vigente campeona del mundo), es muy popular. En España, en cambio, hay poca gente interesada en ganarse la vida como entrenador”.
La escasez de jugadores y entrenadores se recrudece en ciertas partes de España, por lo que clubes como el Ciudad de las Palmas Gran Canaria 2016, el Ourense Galicia Calidade o el Aceites Sierra Sur Hockey Alcalá, todos femeninos, deben recurrir cada año a jugadoras argentinas para poder completar la plantilla.
“No hay suficientes españolas y de las veinte jugadoras nueve son argentinas. Tres son juveniles procedentes de Benalmádena, la capitana Liliana Cipriani vive en Alcalá la Real desde hace cinco o seis años y las demás son fichajes”, dice el entrenador del Aceites Sierra Sur Hockey Alcalá, el también argentino Sergio Nasso, que lleva tres años en la máxima categoría a pesar de verse obligado a recomponer el equipo cada nueva temporada.
-Un Erasmus de Hockey-
Los jugadores y jugadoras argentinas suelen permanecer un año en España y luego regresan a Argentina, a modo de experiencia personal y profesional en otro país, pero existen excepciones como Carla Rebecchi o Guillermo Schickendantz, ambos del Club de Campo, máximos goleadores de la Liga 2009-10 (Rebecchi), 2008-09 (Schickendantz) y EHL 2008-09 (Schickendantz).
“En 2006 se jugó el Mundial en Madrid y surgió la posibilidad de venir al Club de Campo. Decidí probar un año y al final me encantó y me quedé”, comenta Rebecchi, la única de la Liga española elegida dentro del All Star de 2010.
Schickendantz, por su parte, ha pasado desde el año 2003 por la UD Taburiente (actual Ciudad de las Palmas Gran Canaria 2016), por el Club Egara y desde la pasada campaña milita en el Club de Campo. “Decidí venir a España por el idioma y porque quería crecer como jugador”.
Ambos, al igual que la mayor parte de sus compatriotas, reciben un sueldo de su club a cambio de jugar y entrenar a las escuelas. “En Argentina los jugadores y jugadoras son más amateur que en España; casi nadie cobra”, dice Rebecchi. Schickendantz, en cambio, considera que el auge del Hockey en su país supondrá a corto plazo “una fuente de trabajo muy interesante” y apuesta por retornar a Argentina para ganarse la vida como entrenador una vez que cuelgue el stick.
-Hockey, deporte de masas en Argentina pero España disfruta de una mayor competencia-
Con más de ochenta clubes sólo en Buenos Aires, deporte obligatorio para las niñas desde el colegio y apoyo gubernamental a este deporte, especialmente en categoría femenina, el Hockey argentino vive una época dorada como quedó refrendado en el Mundial de Rosario 2010, en el que las locales consiguieron el título. Sin embargo, a juicio de Alejandro Ayabarrena, el único entrenador argentino que ha ganado la liga y sigue en España (la ganó con su equipo actual, el CD Terrassa femenino en la temporada 2007/08), “España cuenta con la ventaja de una liga muy fuerte, la posibilidad de competir contra ligas como la holandesa, alemana o inglesa y unas buenas selecciones”, lo que supone “que sea atractivo para cualquier entrenador porque se crece continuamente en el aspecto profesional”, dice Ayabarrena, que lleva en España desde 2001 y, como buena parte de sus colegas, el Hockey constituye su principal fuente de ingresos aunque también ejerce de profesor en un colegio.
-Argentinos en la española-
El decano del Hockey argentino en España, el actual entrenador de la RS Tenis masculina Alejandro Siri, llegó al San Vicente en 1991. Después de compaginar las funciones de entrenador-jugador retornó a Argentina en 1997 aunque en 2001 cruzó nuevamente el Atlántico para recalar en el Sardinero. También ha dirigido al Club de Campo, a la RS Tenis y, como prueba de la creciente importancia de los entrenadores argentinos, ha formado parte de las selecciones españolas Sub16 y Sub21 (1992 y 1993 con la Sub16, desde 2004 a 2009 como segundo de la Sub21 y en 2010 como seleccionador Sub21).
Las selecciones españolas no sólo cuentan con entrenadores en sus filas, sino también con jugadores y jugadoras nacionalizados. La delantera del Club de Campo Montse Cruz fue la primera, y tras ella siguieron los hermanos Dabanch, Paula y Gabriel, hijos del que fuera entrenador de la UD Taburiente, Sardinero, RS Tenis y RC Polo Jorge Dabanch, actualmente en el HGC holandés.
“Primero llegó nuestro padre, en el año 2000, y unos meses después nosotros. Cuando tenía 15 años me convocó la Sub16 española y la RFEH aceleró los trámites de la nacionalización. Ahora no se me pasa por la cabeza volver a Argentina sino que quiero hacer mi vida en España”, dice la internacional española Paula Dabanch.
-Hockey globalizado-
Es de suponer que tanta influencia argentina ha debido dejar huella en el Hockey español, pero los entrenadores aluden a aspectos personales más que a otros de cultura nacional hoquística. “La manera de jugar está globalizada y cada entrenador marca su propio estilo”, dice Siri, quien sin embargo considera que en general, el Hockey español “es más ordenado tácticamente que el argentino”.
Castaño también cree que cada entrenador tiene unas preferencias y unas manías que marcan el juego, pero considera común al entrenador argentino “la entrega de sus equipos”. “En Argentina la vida es más complicada, todo cuesta más, y cuesta tanto, que hay que dar el máximo. Los entrenadores argentinos podemos perdonar muchas cosas pero no la falta de entrega”.
De la misma opinión es el entrenador catalán del Club de Campo femenino Arseni Sañé. “Los equipos dirigidos por argentinos suelen ser muy luchadores y agresivos. Nunca bajan los brazos”, dice Sañé, quien considera “positivo para la mezcla de culturas la llegada de entrenadores argentinos” y que, al igual que sus colegas, no cree que exista un modo de jugar argentino u otro español. “A nivel táctico no se pueden inventar muchas cosas y cada entrenador, sea de donde sea, plantea el juego en función de las características de su equipo”.
Uno de los debutantes de esta temporada, el entrenador del RC Jolaseta masculino Pablo Fernández apunta una diferencia importante. “En España todos los partidos se juegan en campo de agua, mientras que en Argentina muchos son de arena, lo que hace que la evolución del hockey sea diferente. Los partidos sobre arena son más lentos y el juego más impreciso. Eso nos aleja del verdadero Hockey. España, además de contar con campos de agua, está cerca de Holanda y se nutre de los conocimientos que vienen de allá. Holanda y Alemania marcan la pauta del Hockey masculino e imponen las modas, y éstas llegan rápido a España. En el femenino, el referente es Argentina”.
Entrenadores argentinos en División de Honor:
Masculino:
RS Tenis: Alejandro Siri
CH Pozuelo: Andrés Mondo
RC Jolaseta: Pablo Fernández
Femenino:
SPV’51: Jorge Lombi
Club Egara: Patricio Keenan
Ciudad de las Palmas Gran Canaria 2016: Marcos Oviedo
Real Sociedad: Carlos Castaño
Aceites Sierra Sur Hockey Alcalá: Sergio Nasso
Ourense Galicia Calidade: Néstor Fabián Mercado
CD Terrassa: Alejandro Ayabarrena
Fuente:Prensa RFEH
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