PAR-TI-DA-ZO el que vivimos esta mañana por la final de la World League 3 en Johor, entre Argentina y el número uno del mundo, Alemania. Los chicos argentinos perdieron 2-4 resultado que no demuestra lo sucedido en el desarrollo del encuentro.
Argentina le jugó de igual a igual al Campeón Olímpico en la noche malaya. Con un gran despliegue físico, en especial de los delanteros y excelentes actuaciones de Barreiros, Mazzilli y Vivaldi, los dirigidos por Retegui demostraron que están para competir en lo más alto. Solidaridad defensiva y un equipo compacto tanto en ataque como en defensa, le dieron a los chicos la ilusión de terminar arriba en el marcador o forzar un shoot out hasta los últimos 4' de partido.
Zeller abrió el marcador tomando un desvío sobre Vivaldi en la que quizás había sido la primera llegada clara de los germanos mientras Argentina buscaba sin suerte en el área rival. Manteniendo el orden y la convicción, los albicelestes forzaron el corto a través de Barreiros y un Peillat que tras dejar al corredor alemán lleno de moretones, pondría las cosas 1-1.
Un error en la marca dejó a Fuchs solo en el punto de penal para fusilar a Vivaldi que no logró evitar el 1-2. Y cuando parecía que el final del primer tiempo encontraría a los nuestros en desventaja, otra vez Barreiros y su molesta presencia en el área le dió al oportunísimo Paredes la chance de robar la bocha y poner el 2-2 con que cerraría la etapa.
Ya en el segundo tiempo Argentina y sus tres de fondo mostrarían las ganas de ir por el oro. Y más allá de esporádicas llegadas de Alemania, bien defendidas por Vivaldi, fueron los chicos argentinos quienes más chances tuvieron frente al arco.
Con apenas 4' para terminar el tiempo regular, una escapada de contragolpe le daría un corto a los europeos. Tras el rebote largo de Vivaldi, Ruehr puso un palazo cruzado que Fuchs desvío arteramente por detrás del arquero argentino.
Con el 2-3 y menos de 2' por jugar, Argentina se lanzó al ataque llegando en un par de ocasiones pero dando pie al contragolpe letal que daría a los alemanes la chance de cerrar el marcador en el 2-4 definitivo a través de Wesley.
Pero a no confundirse. Argentina mereció más que lo obtenido pero lo logrado es muchísimo: un podio en un torneo entre los mejores, la chance de revancha en la final de la World League en Nueva Delhi en enero y lo más importante, el pasaje directo al Mundial de La Haya.
Gran tarea conjunta de los chicos que con nuevo cuerpo técnico muestran que a pesar de estar acostumbrándose a un nuevo sistema de juego, tienen corazón, entrega y las ganas de que nuestro país también sea uno de los mejores del mundo.
Como un extra, el "mitrero" Gonzalo Peillat, se llevó el premio compartido como goleador del torneo y el Premio al Talento Juvenil.
Como un extra, el "mitrero" Gonzalo Peillat, se llevó el premio compartido como goleador del torneo y el Premio al Talento Juvenil.
¡Felicitaciones chicos! ¡Vamos Argentina!
Foto: Twitter/CRetegui
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